El Sol de San Juan del Río
10 de diciembre de 2009
Armando Velazco
San Juan del Río, Qro.- Se ejercitó acción penal en contra de Gerardo Reséndiz Zúñiga, como probable responsable del delito de homicidio doloso calificado en agravio de su cónyuge Noemí Alejandra López Muñoz, lo anterior lo dio a conocer ayer la Procuraduría General de Justicia del Estado, citando que los hechos quedaron asentados en la averiguación previa C/291/09 y proceso 153/2009 en el Juzgado Mixto de Primera Instancia de Cadereyta. El 19 de noviembre, elementos de la DID de Cadereyta fueron avisados del hallazgo de un cuerpo del sexo femenino, cerca del camino que conduce al relleno sanitario.
Durante las investigaciones y tras el reporte de una persona desaparecida, se logró identificar el cuerpo de la mujer como de quien en vida llevó el nombre de Noemí Alejandra López Muñoz. El Ministerio Público Investigador solicitó la presencia de Gerardo Reséndiz Zúñiga, para que identificara el cuerpo de su esposa. En su declaración inicial, dicha persona manifestó que días antes habían realizado un viaje y al regresar, Noemí Alejandra se mostró interesada en incorporarse a su trabajo inmediatamente, lo que provocó molestia y desconfianza en su pareja, quien sospechaba de una posible infidelidad. Posteriormente, en la declaración de Gerardo surgieron una serie de inconsistencias con respecto a sus actividades y la desaparición de Noemí Alejandra, además de que presentaba en la mano un rasguño, del cual no especificó su origen.
De igual manera, manifestó que el pasado 18 de noviembre -alrededor de las 9:00 horas- Noemí Alejandra se encontraba en el domicilio que habitaba con él, así como con sus hijos; cuando inició una discusión entre ambos, esto al encontrar el imputado una memoria USB que contenía entre otros documentos algunas fotografías de una persona del sexo masculino. Gerardo Reséndiz cuestionó a su esposa sobre la procedencia de la memoria, manifestando ella que posiblemente era de una amiga; respuesta que molestó al sujeto y aprovechando que ésta se encontraba de espaldas, puso su antebrazo en el cuello de la mujer y aplicó fuerza hasta lograr obstruir las vías aéreas y finalmente, provocar el desmayo.
En el piso, el ahora imputado colocó alrededor del cuello de la víctima un tramo de cable eléctrico y aplicó fuerza hasta causarle asfixia por estrangulamiento; posteriormente la desnuda de la cintura hacia abajo, con la finalidad de que al encontrarse el cuerpo las autoridades pensaran que había sido víctima de un ataque sexual. En bolsas de plástico que compró el propio detenido, colocó el cuerpo de Noemí Alejandra, atando sus extremidades inferiores y superiores con masking tape; y lo subió a su camioneta Ford, Windstar, color verde. En otra bolsa, colocó la ropa de su víctima y objetos personales.
Ya con el cadáver en la camioneta, Gerardo Reséndiz Zúñiga condujo sobre un camino de terracería cercano al relleno sanitario ubicado en la comunidad El Tejocote, Cadereyta, donde abandonó el cuerpo y regresó a su casa a realizar sus actividades de manera habitual. Al día siguiente, el probable responsable aparentó preocupación por la ausencia de su cónyuge e incluso acudió a diversos hospitales y con familiares cercanos de ella, para posteriormente denunciar su desaparición. Ante esto, el Ministerio Público solicitó al Juez Mixto de Primera Instancia el arraigo por 15 días en contra de Gerardo Reséndiz Zúñiga, con la intención de robustecer la investigación y realizar los peritajes correspondientes y poder demostrar su probable participación en los hechos, el cual fue concedido.
De las pruebas periciales practicadas -ADN- se confirmó que en las uñas de la víctima había rastros epiteliales que coincidían con la muestra de ADN del auto viudo. El Ministerio Público Investigador determinó el 4 de diciembre el ejercicio de la acción penal y civil reparadora del daño en contra de Gerardo Reséndiz Zúñiga. Asimismo el 7 de diciembre, el Juez Mixto de Primera Instancia Penal en ese distrito, giró la orden de aprehensión solicitada por el órgano investigador, la cual fue cumplida por elementos de la DID, por lo que ha sido internado en el CeReSo de San Juan del Río a disposición del juez de la causa, ante quien rindió su declaración preparatoria, sin que tenga derecho a obtener libertad provisional bajo caución. En caso de que el imputado sea declarado culpable del delito que se le atribuye, habrá de ser sancionado con pena de prisión de entre 15 y 50 años.
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