El Dragón de Mondragón
Por: Carlos Mandragón Barrón
Estimado lector si usted me lo permite, hoy hablaremos de política comparándola con un delicioso queso de olor fuerte de color amarillento y que al saborearlo, incluso agarra hasta la lengua y que tiene muchos hoyos… Pero no sea mal pensado amigo lector; por el color no se confunda no vaya a ser que piense que me refiero al del “Sol Azteca” el cual no tiene nada que ver con esta descripción, aunque después de la elección en estas tierras sanjuanenses quedo con muchos hoyos pero como diría mi abuela: esa es otra historia y ¡NADA QUE VER! Con esta columna… Muchos hablan de política, pero en nuestro país la podemos describir como un buen amigo con el cual tuve el gusto de platicar hace unos días en la ciudad de Querétaro me dijo que para él: “LA POLÍTICA EN MÉXICO, ES COMO EL QUESO GRUYERE” y le pregunte ¿Por qué? Contestándome de inmediato; mira mi Carlos la mayor parte de los políticos en nuestro país, solo buscan su bienestar personal, hacerse ricos de la noche a la mañana, engañar a la ciudadanía de que las cosas van a cambiar y darles “ATOLE CON EL DEDO” así mismo aprovecharse y escaparse de cualquier situación jurídica, por cualquier hoyo que ellos y que ya le hicieron a ese sabroso queso que les pusieron en la mesa el cual se llama sistema… Volviéndolo como el queso gruyere el cual tiene tantos hoyos, que no puedes contarlos, ni percibir por donde se fugaron los recursos, a donde se fue la lana, en que se invirtió y a quienes realmente beneficio, hoy en día mi buen amigo Carlos nos dan y siguen dando con el mazo en la cabeza vendiéndonos la ilusión con sueños Guajiros que a nuestro pueblo le irá mejor… Además esos políticos solo resuelven y hacen leyes que los proteja, ya ves a cuantos se les han exhibido en las redes sociales solo observa lo que el Chapo despepito en contra de Calderón y Peña los cuales salieron a desmentir esos señalamientos de inmediato, poco después de que Calderón renunciara al PAN y en la recta final Peña ¿coincidencia o justicia?... Continua comentándome; yo he participado en varias contiendas electorales locales y nacionales pero te pido que no digas quien soy porque ya estoy cansado, pero a poco ¿No siempre es lo mismo? amigo Mondragón… ¿Cómo le quedo el ojo amigo lector?... SEGURAMENTE QUE USTED, COMO YO COINCIDIMOS EN ALGO DE LO QUE ESTE AMIGO COMENTA…. Al darme la oportunidad de contestarle y para darle más cuerpo a esta conversación lo llamaremos Germán… Mira Germán, efectivamente la política de esos políticos que usan su puesto para beneficiarse y vivir de las mieles del poder es vergonzante e incluso no los deberíamos llamar políticos, la palabra adecuada sería: VIVIDORES Y OPORTUNISTAS es aquí, en donde me interrumpe y comenta ¡No hables tan fuerte Mondragón no vaya a ser que alguien nos reconozca! y luego se sienta agraviado “SE PONGA EL SACO” y que quiera cuartar nuestra libertad de expresión… Le volví a responder a Germán esa política que tanto hace daño y que deja un sabor amargo en la boca es la que le hace daño a nuestro país, además Germán ¿Qué puede pasar?... Y me contesta medio asustado que me cesen, me liquiden, me corran o algo peor y por el bien de él, mejor bajamos la voz, no vaya a ser que se nos aparezca ¡El Diablo!… Es aquí amigo lector, en donde cabrían muchas preguntas: ¿En México existe la libertad de expresión, somos un país en donde nuestros políticos de cualquier nivel tienen la capacidad de aceptar la crítica y no vengarse más adelante, el político que queremos los ciudadanos dentro de la política para servir, es el que ya está dentro de ella o aún no existe, se necesitan políticos de carrera y con visión para el progreso con valores éticos para el bien común, es importante limpiar la política de políticos vividores y oportunistas para volver a creer en estos, se necesitan políticos mayormente comprometidos con su gente y no con sus grupos haciendo a un lado los intereses de unos cuantos y beneficiar a esa gran masa?... Estas preguntas y muchas más quedan para reflexionar… Esperando que este 01 de Diciembre realmente se de, el cambio verdadero que tanto sea pregonado… ¿No cree usted amigo lector?... |