El Dragón de Mondragón

Por: Carlos Mondragón Barrón

“NIÑOS, HACIENDO NIÑOS”

Estimado lector, si Usted me lo permite le compartiré esta columna que publique hace varios años la cual le hice algunas pequeñas adecuaciones y posiblemente le extrañara del porque utilice ese título de: “Niños, haciendo niños” ... Pero si hacemos un análisis y reflexionamos que en la actualidad vivimos en un mundo día a día más globalizado, materialista, altamente tecnificado y ciber- náutico en donde constantemente estamos bombardeados por los medios de comunicación visuales por escenas y comentarios sexuales explícitos e implícitos incluso en la música, los videos, las películas y los comerciales, comprenderíamos del porque el amor sea convertido solo en deseo, pasión y sexo dejando a un lado lo que muchos vivimos hace algunos ayeres con lo que era el significado del amor… Hoy gracias a la tecnología se pueden mandan mensajes con doble sentido hacia los niños y adolescentes en virtud que miles de ellos tienen acceso a un celular de los llamados “inteligentes” en donde nuestros jóvenes y niños conocen perfectamente sus funciones volviéndose maestros con estas nuevas herramientas tecnológicas… Pudiendo hacer viral cualquier imagen, video de cualquier tipo y compartiéndolo a sus contactos de manera inmediata, dándoles a entender que aparentemente lo más importante es la siguiente frase: “TU DIVIÉRTETE, NO PASA NADA, NO HAY CONSECUENCIAS, DISFRUTA LA VIDA Y TEN SEXO” … Es aquí en donde los jóvenes y niños son atraídos fuertemente a lo desconocido, aunque muchos de ellos podrían darnos una cátedra del tema, pero esto es otra cosa, pues el verdadero problema es que no se les da el mensaje completo informándoles de las consecuencias de lo que en realidad puede suceder… Observamos con gran preocupación que estos niños-adolescentes se encuentran totalmente inmersos en esta problemática, muchos de ellos menores de 16 años, sosteniendo relaciones sexuales sin protección, sin medidas y sin ninguna responsabilidad, algunos incluso ya con hijos y con esa gran responsabilidad de ser padres… Estos jóvenes están siempre en busca de compañía, atención, afecto, comunicación, amor, entre muchas cosas más, que en su núcleo familiar no encuentra y/o no es insuficiente, ya que sus padres tienen que trabajar para solventar los gastos familiares… Estos niños-adolescentes viven un vacío en esas cuatro paredes llamado “HOGAR”, por lo cual tienen que salir en busca de “CON QUIEN CONTAR” para comunicarse, solicitar ayuda, buscar apoyo, para contarles sus problemas, dudas e inconformidades y es aquí en donde cometen grandes errores, muchos de ellos caen en el consumo de altas cantidades de alcohol, otros se refugian en las drogas, algunos más buscan relaciones placenteras con mucho riesgo y sin ninguna precaución provocando en la mayoría de los caso como dice el título de esta columna “NIÑOS, HACIENDO NIÑOS”, para cubrir ese vacío existencial… Pero cuando pasa esto, nos llenamos de culpa y nos hacemos muchas preguntas: ¿Por qué cayó en las drogas, como se volvió tan agresivo o agresiva, cuando empezó a robar o porque violó, donde y/o en qué momento fue que la embarazaron y porqué embarazo, en que falle como padre o madre?... Muchas preguntas más nos podríamos seguir haciendo para auto castigarnos amigo lector y difícilmente aceptaríamos la respuesta, pero solo como consuelo le puedo decir; ¡FALLAMOS EN TODO Y EN NADA!… Es aquí en donde los porqués ya pasan a un segundo término… Mejor imaginemos amigo lector ¿Que va hacer ese niño-adolescente con una criatura, como lo va a mantener, que le va enseñar, de que y/o como va a vivir?... Esta canijo, y como diría mi abuela:  ahora si la cajeteaste hijito y a fregarte, a darle duro para traer más leche para la chata ya que tendrás más bocas que alimentar por no haber cuidado a tu hijo o hija… ¡Dura y cruda verdad amigo mío, a trabajarle al doble!... Ya que sabemos que estos niños-adolescentes carecen de todo y peor aún, no se pueden ni cuidar ni a sí mismos, sabiendo que su inmadurez los llevara a cometer error tras error ¿Cómo educaran a un pequeño y/o lo sacaran adelante?... Aquí cabria otra pregunta ¿Qué hacer? Y más aún cuando la comunicación con nuestros hijos e hijas es nula, cuando no hemos podido ser ejemplo para ellos e incluso no existe el tiempo para atenderlos y más cuando no existe la confianza y apertura para hablar de cualquier tema con nuestros hijos e hijas, es aquí en donde tendremos que ser formadores, educadores y guías tomando el roll de abuelos-padres de nuestros nietos e hijos, ya que no pudimos serlo en su momento con nuestros propios hijos… ¿No cree usted amigo lector?...