por Monsetrrat García
Jesús Delgado López, comerciante cuyo establecimiento se ubica en las inmediaciones de la caseta de cobro de Palmillas, aseguró que existe una organización delictiva, compuesta por al menos 10 personas que se dedican a robar a los conductores de todo tipo de vehículos que circulan por este tramo de la autopista federal 57.
Indicó que esta circunstancia afecta directamente al comercio, pues inhibe que los conductores que pasan de forma recurrente por la autopista se detengan y consuman en el parador, situación por la que estimó, disminuyeron las ventas hasta 50 por ciento.
"Tengo dos negocios y me veo afectado porque ya no tengo las mismas ventas en las noches, porque ya no se paran Bajaron las ventas casi en 50 por ciento de un año para acá. Llegaron uno o dos que robaron, pero ahorita ya hay una plaga de mucha gente".
Estimó que son alrededor de 20 robos por noche los que por lo regular observa. La causa que consideró ayuda a que ocurran estos ilícitos, es que en el camellón que divide ambos sentidos de la autopista no existe alumbrado público y en esa zona se esconden los delincuentes en la penumbra para sorprender a los automovilistas.
"Se baja el camionero y nada más lo están viendo, porque allá hay luz, y acá no hay luz, porque los conductores no ven debido a que las personas están tiradas en el suelo y ven rápido a la persona que se baja, ven dónde se mete y rápido van y en dos minutos le rompen el parabrisas, roban el estéreo, los teléfonos, todo".
La situación se agravó, dijo, con la barra de contención colocada desde hace un año, por lo que pidió a las autoridades correspondientes la instalación de alumbrado público o una malla ciclónica alrededor para impedir que los cacos se escondan en dicha zona.
Supone que los delincuentes son personas que viven en los alrededores. Precisó que cuando solicita apoyo a la Policía Federal, acuden elementos, pero "Vienen, ya hasta los conocen, y no hacen nada".
También hubo robos a comercio, pero son los menos, lo preocupante expuso, es que los operadores de vehículos que son sus principales clientes tienen prohibido pararse en estos tramos, sólo lo hacen de forma rápida cuando requieren alguna refacción.
Pormenorizó que es un hecho que también afecta al turismo, dado que los afectados se llevan una mala imagen. Agregó que por lo regular estos hechos no los denuncian las víctimas, pues consideran que si lo hacen pierden más tiempo y dinero.