El Sol de San Juan del Río
17 de marzo de 2012
Redacción
San Juan del Río, Qro.- Tal como lo adelantó El Sol de San Juan en su edición del jueves 15, cayó en manos de agentes de la Dirección de Investigación del Delito, el autor material del crimen cometido en agravio de quien en vida llevó el nombre de Irma Catalina Conde del Valle, que tuviera su domicilio en Paseo del Abanico No. 1, San Gil. El presunto, de oficio caddy, responde al nombre de Eduardo González Trejo, de 33 años de edad, mismo que de inmediato fue puesto a disposición del Ministerio Público.
Cita de PGJE que, el 3 de febrero, el Ministerio Público fue notificado sobre el hallazgo de un cuerpo sin vida, perteneciente a una persona de género femenino en las inmediaciones de la comunidad Noria Nueva, Pedro Escobedo, lo que dio origen a la averiguación previa PE/47/2012. Personal ministerial, peritos y agentes investigadores del delito, se constituyeron en el lugar, dando fe del cadáver que presentaba huellas de violencia física en la extremidad cefálica.
La autopsia permitió establecer como causa de muerte traumatismo craneoencefálico severo. Una vez que se logró identificar a la víctima, se obtuvo información en relación a sus actividades y relaciones personales, de tal forma que los Investigadores del Delito asignados al esclarecimiento detectaron que previo al fallecimiento, la víctima había tenido diversas fricciones con uno de sus empleados de nombre Eduardo González Trejo, quien realizaba funciones de caddy para la señora cuando practicaba golf, además de fungir como chofer y realizar actividades de mantenimiento en la casa de la ofendida.
De esa manera, los agentes identificaron a Eduardo González Trejo como la persona que realizaba funciones de "caddy" para la víctima cuando practicaba golf, además de fungir como chofer y realizar actividades de mantenimiento en la casa de la ofendida.
Cabe señalar que inmediatamente después del hecho ilícito, el probable responsable intentó sustraerse de la acción de la justicia, cambiando de residencia en diversas ocasiones; sin embargo, los esquemas de inteligencia implementados por la dirección de investigación del delito permitieron lograr su ubicación y aseguramiento para ponerlo a disposición del Ministerio Público.
Inicialmente, el imputado negó su participación en los hechos, no obstante que su declaración presentaba numerosas inconsistencias. Finalmente, terminó aceptando que él mismo había dado muerte a la mujer, en razón de los malos tratos y humillaciones que le había hecho pasar, además de que -dijo- no le pagaba por los trabajos que hacía en su domicilio.
Detalló que el día del hecho, citó a su víctima al exterior de los Juzgados Civiles de la Ciudad de San Juan del Río y le dijo que continuaría trabajando para ella, por lo que juntos se trasladaron en el vehículo de la ofendida a diversos sitios, como parte de sus actividades cotidianas.
Cuando regresaban al domicilio de la ofendida, en el Fraccionamiento San Gil, el imputado se detuvo en un camino vecinal y comenzó a golpear a su víctima con los puños en la cabeza, hasta que logró dejarla semi inconsciente. Posteriormente, condujo el vehículo hasta la comunidad de Noria Nueva, en Pedro Escobedo, donde buscó un lugar despoblado para seguir agrediendo a la mujer, esta vez utilizando un objeto contundente (arnés metálico) y después una piedra, hasta causarle la muerte.
Tras consumar el homicidio, condujo el automóvil de la ofendida -tipo Jaguar, con placas para el Distrito Federal- hasta un predio baldío del municipio de Tequisquiapan, donde le prendió fuego. Entretanto, Eduardo regresó a su domicilio para preparar la huida.
Cabe señalar que el Ministerio Público ordenó el desahogo de diversas diligencias, entre las que destaca la intervención pericial, declaraciones de allegados a la víctima, investigación en otras entidades federativas y posterior a la detención del probable responsable se realizó la reconstrucción de hechos, durante la cual el imputado detalló en forma clara cómo privó de la vida a su víctima.
Por todo lo anterior, el Ministerio Público ejerció acción penal en contra de Eduardo González Trejo, por lo que fue puesto a disposición del juzgado tercero penal de San Juan del Río, dentro del proceso 83/2012, como probable responsable de homicidio calificado agravado.
De igual forma, se realizó la reconstrucción de hechos, para saber cómo sucedieron los hechos. |